En primer lugar, se desengrasa cuidadosamente el vidrio y, a continuación, se pinta con un pincel muy suave utilizando pintura especial para vidrio. El pie del cuenco se pinta en dos capas, mientras que los bordes sólo se colorean.
Una vez seca la pintura, se pegan los recortes de servilleta (aquí mariposas azules y pequeñas flores azules) mediante la técnica de encolado inverso con barniz en spray.